(Fotografía de Lembranza)
No existe esponja para lavar el cielo
pero aunque pudieras enjabonarlo
y luego echarle baldes y baldes de mar
y colgarlo al sol para que se seque
siempre faltaria el pajaro en silencio
no existen metedos para tocar el cielo
pero aunque te estiraras como una palma
y lograras rozarlo en tus delirios
y supieras al fin como es el tacto
siempre te faltaria la nube de algodon
no existe un puente pa cruzar el cielo
pero aunque consiguieras llegar a la otra orilla
a fuerza de memoria y pronosticos
y comprobaras que no es tan dificil
siempre te faltaria el pino del crespusculo
eso es por que se trata en un cielo que no es tuyo
aunque seas impetuoso y desgarro
en cambio cuando llegue al que te pertenece
no lo querras lavar ni tocar ni cruzar
pero estaran el pajaro y la nube y el pino
Benedetti
22 comentarios:
Grande y bello poema nos dejas de nuestro querido Benedetti, es verdad necesitaríamos cientos de esos baldes...para lavarlo y siempre encontraríamos volando y aderezándolo a esas bellas aves aleteando...
Un abrazo. Lembranza.
genio Benedetti.
Hola Lembranza, bella siempre la poesia del gran Benedetti, ete poema me encanta. Besos, cuidate amiga.
El hombre siempre quiere tocar y cambiar las cosas que no le pertenecen, pero cuando te toca usar lo tuyo, la cosa ya cambia. Bonito poema.
un abrazo
Conocía este poema de Benedetti pero no me canso de leerlo y releerlo. Cuanta razón tiene. Constantemente estamos tratando de cambiar esto o aquello, pero sin admitir críticas ni cambios propios. Muy propio del ser humano, Muy propio del ser destructivo. Pero no perdamos la esperanza mientras sigan existiendo seres como el gran Maestro. Un beso Lembranza.
Que gran poema, creo que cuando uno encuentra su propio cielo, se da cuenta de que el que tuvo ganas de lavar, no era el verdadero.
Un beso.
Que no nos quiten nuestro cielo, el que nos corresponde a cada uno.
Grande, Benedetti.
Abrazos.
Hermoso poema dos tres de Benedetti
¡como lavar el cielo!
Una reflexión muy certera pero que solo se le ocurrió al maestro Benedetti, gracias por compartirlo- un abrazo para vos.
Hay tantos cielos.... El que no lavaríamos nunca, el que nos lava de vez en cuando, el que tocamos con los dedos del amor, el que nos invita a volar.... y el cielo del cielo.
Precioso el poema.
Un abrazo fuerte, querida amiga
Gracias Asun, el cielo esta últimamente bastante encapotado, esperemos que sea poco tiempo y, vuelva a lucir con todo su esplendor. Un abrazo
Me alegra que te guste David. Gracias. Un abrazo
Sandra, muchas gracias por tu visita, siempre es un placer. Un abrazo amiga
Si, tienes razón, nos gusta cambiar las cosas, aunque pensemos que están bien, buscamos la forma de cambiarlo todo. Gracias. Un abrazo
Yo tampoco pierdo la esperanza, aunque a veces, viendo lo que esta pasando, es difícil creer en el cambio. Gracias por tu visita Karras, esta es tu casa. Abrazos
Por un momento yo también encontré el mio, ahora busco otro, donde pueda quedarme. Abrazos
Gracias Isabel por tu visita. He estado un poco alejada este mes, pero aquí estoy, con las ganas renovadas y lista para seguir. Un abrazo
Lembranza gracias por tu visita y comentario en el Blog. Saludos.
Hola Lembranza, paso a dejar saludos y un beso amiga, cuidate mucho.
Eso digo yo Andre, como lavar el cielo?? Si cada uno de nosotros lavasemos un poquito del nuestro, reluciria. Un abrazo
Paula, es que el maestro Benedetti, es el maestro de maestros, no se conforma con escribir poesia, no, nos hace pensar en cada una de sus palabras. Abrazos
Queti, tienes razón, algunos cielos, no quisieras lavarnos nunca, son hermosos tal cual están. Hay otros que no tienes más remedio que lavarlos. Un abrazo
Publicar un comentario